15 de enero de 2012

Se llama Beatriz, pero a ella le gusta que le digan Bea


 

Son momentos como los pasados, los que te hacen reflexionar. Esa certeza de que al marchar solo recordaré lo importante. Esa certeza de que, esté donde esté, jamás olvidaré todo lo que hiciste, haces y harás por mi. Pasarán más de mil años, muchos más, y seguiremos donde estamos, porque el mejor de los momentos que juntas hemos vivido será el peor de todos los que nos quedan por vivir.  

Vino blanco y secretos de confesión