28 de junio de 2012

Últimamente me dueles todos los días. No hay nadie que frene mis locuras. No hay nadie que me diga basta de hacer tonterías. No hay nadie que me pare los pies y me obligue a seguir una rutina saludable. Seguramente no sepas de lo que te esté hablando o quizás si, aunque no lo quieras ver. Seguramente ni me estés leyendo. No te puedo pedir que me hagas una señal, aunque muera por ella. No te la puedo pedir aunque te la esté pidiendo sin pedirla abiertamente. No te mereces que te pida nada. Ahora mismo tengo ansia de dependencia. Las cosas se me están yendo de las manos. Nadie me controla. Quién me controlaba ya no me controla. A veces se hace imposible convivir conmigo misma, me paso cada minuto de cada hora sopesando todo, calibrando, calculando. No es sano, lo sé, lo sabes (aunque nunca te haya gustado hablar de ello). No se que Clara está escribiendo esto. Acabo de tener otro momento de cordura y esta vez no se cuando tiempo durará, no se cuanto tiempo tardará en volver la Clara "obsesivacompulsivaenfermadelacabeza". Lo dejo por escrito, aunque la Clara que venga después no lo vaya a entender.