16 de mayo de 2011

Día 1 de la "Dieta con Mámas"

Hemos superado el primer día. No ha sido fácil, pero tampoco excesivamente difícil. Estoy hipercansada de pensar en comida y de pensar que no puedo comer. Empiezo a sentirme igual que hace relativamente poco tiempo. Comer se va a convertir en un trámite. Eso da mucho miedo.
Hemos amanecido a las 7 de la mañana. Un té rojo calentito se ha colado por la garganta. Sudadera, chándal y playeras. Salimos de casa y hace un frío que te jodes. Hemos andado durante 45 largos minutos. Me ha dado el flatossss... he trotado un poco (como 1 metro) y he parado... se me salía el corazón por la boca, soy una mierdilla. Mi madre anda como si la fueran a dar un premio al llegar a casa, cuando únicamente nos espera un café con agua y unas mierderas lonchas de pavo. Con semejante perspectiva... ¿quién tiene ganas de llegar? Hemos salido del pueblo y, por caminos que no sabía ni que existían, hemos llegado a una zona del pinar, que tampoco sabía que existía. Creo que toda esta mierda, además de ayudarme a perder peso, me va a servir para conocer más zonas de picadero en mi pueblo. Esto, sobra decirlo, nunca viene mal.
Desayuno: café con leche desnatada + tres lonchas de pavo sabor mierda.
Ducha y al aulario. Menudo aburrimiento, me he bebido medio litro de agua. He salido al descanso con un té al limón de la maquina que sabía a ambientador de coche. Me he puesto a andar y ya que estaba me he ido a casa de Alex. Hemos hablado de chicas y más cosas.
Almuerzo: un quesito light.
La hora de la comida parecía no llegar nunca. Total... ¿para qué?
Comida: pechugas de pollo con 0,00004 cl de aceite + té rojo.
Jamás imaginé que comer pechugas de pollo iba a ser tan triste. Habría masticado tornillos si me hubieran dejado probar un poco de la comida de mi padre, y eso que era conejo guisado. Ho-rri-ble.
De vuelta al aulario. A beber medio litro de agua más. Ni he querido llevar merienda, para comer pavo de mierda mejor morir de hambre. A las ocho y media, ya en clase, las tripas me sonaban a concierto indie.
Con toda la depresión y el pis del mundo he llegado a casa a las 10 y pico.
Cena: salmón ahumado + queso fresco.
Me quiero morir. Con toda la depresión me he subido a la cama, y lo que esta mañana parecía que iba a ser una entrada divertida acaba de convertirse en una de mis mierditas.
Mi madre acaba de entrar hace poco y ha confundido la batería del móvil con una galleta. Fíjate como estamos... y solo llevamos un día. Estoy viviendo el drama, pero tampoco os penséis que es para tanto. Es que soy un poco exagerada y solo es el primer día. Ya le sacaré puntos positivos a todo esto. Porque lo de adelgazar para encontrar novio no me sirve.


Encima hoy no he hecho caquitas.

PD: en el descanso del aulario esta tarde hemos visto una oveja con tiña. La pobre se ha quedado rezagada del rebaño y no sabía donde estaban sus amigas. La hemos empezado a gritar como si fueramos unas ganaderas extremeñas. So cute.